(LifeSiteNews) La Sociedad para la Protección de Niños No Nacidos (SPUC) presentó ayer sus documentos para apelar la decisión de un juez de respaldar los polémicos planes del gobierno escocés para permitir abortos hechos por por sí mismos en el hogar.
SPUC Escocia presentó la demanda legal en enero, luego de que la directora médica de Escocia, la Dra. Catherine Calderwood, se rehusara a revertir su decisión de autorizar la toma de misoprostol (la segunda etapa de un aborto médico) fuera de un entorno clínico.
La apelación sigue a una audiencia de dos días a principios de este año en el Tribunal de Sesión, en Edimburgo, que Lady Wise rechazó.
Lucharemos todo el camino
Hablando después de que los documentos se depositaran en Edimburgo, John Deighan, director ejecutivo de SPUC Scotland, dijo:
«Aunque nos decepcionó la decisión original, siempre fue nuestra intención luchar por este caso en todo momento. Nuestra posición y creencias siguen siendo las mismas».
«En la vista original, nuestros argumentos expusieron convincentemente la ilegalidad de las acciones tomadas por el Gobierno escocés en contravención de la ley. Luego de una consideración exhaustiva de la sentencia y en conjunto con el asesoramiento jurídico, ahora apelamos la decisión».
«Se lo debemos a nuestros seguidores que continúan haciendo donaciones para cubrir nuestros costos legales».
Complicación del trauma del aborto
El desafío de la SPUC se basó en dos razones principales: en primer lugar, que el hogar no es un lugar aprobado para abortos, y en segundo lugar, que la Ley de Aborto exige la presencia de personal médico, de enfermería o personal clínico durante un procedimiento.
Sin embargo, una de las principales preocupaciones es cómo pasar por el procedimiento en casa agravará el trauma que el aborto inflinge a las mujeres y las hará más vulnerables a la coacción.
«El descuido del daño que el aborto tiene en las mujeres es reprensible y algún día exigirá una respuesta sobre por qué se ha permitido que dure tanto», dijo Deighan. «La actitud laxa hacia el aborto también ha permitido la coerción generalizada de las mujeres para tener abortos».
«En lugar de ser realmente una elección de una mujer, con frecuencia se ha convertido en una opción a la que las mujeres se ven obligadas cuando su embarazo es inconveniente para los demás. Muchas mujeres dirán después que no tenían más opción que el aborto. Esto agrava el sufrimiento mental que soportan las mujeres posabortivas».
Trivializar terrible experiencia
«La política de píldoras abortivas trivializa la terrible experiencia que el aborto con medicamentos inflinge a las mujeres y ahora puede hacerlo en un entorno donde las mujeres se auto administran drogas poderosas sin una supervisión médica o apoyo adecuados», continuó Deighan.
«Seguimos alarmados por las políticas del Gobierno escocés para liberalizar el aborto, esto es difícil de igualar con sus otros compromisos en materia de salud y derechos humanos».
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