Los padres de Madeleine McCann, la niña británica desaparecida hace 10 años en Portugal, reportaron a la policía la desagradable extorsión del que son víctimas por parte de una vidente, quien demandó un pago a cambio de revelar el supuesto paradero de la menor. Lo ha publicado el medio argentino Infobae.
Kate y Gerry McCann denunciaron que Susan Kelly aseguraba saber dónde estaba su hija, ya que habría recibido la información en tres “visiones”, y los contactó para exigir un pago. “Eso les causó más dolor innecesario”, lamentó Clarence Mitchell, portavoz de la pareja, que describió los mensajes como una “treta de extorsión” y una “cruel estafa”.
“Háganme una oferta por cada sueño”
Kelly escribió: “Guardé estos sueños desde hace tiempo y no estaba segura de que puedan ser tomados como un hecho. Ahora estoy segura de revelar el contenido”. Por ello, contactó a los padres: “Si están interesados, háganme una oferta por cada uno los tres sueños individualmente”.
La presunta psíquica no reveló detalles sobre su nacionalidad y sólo agregó que ella y su hija están en bancarrota. “Tengo poco dinero y no puedo pagar mis cuentas. No hago esto por razones comerciales, no quiero publicidad”, argumentó. En cuanto a los sueños, se limitó a comentar: “Dios me dio el privilegio de ver la verdad”.
Las autoridades británicas aprobaron una partida de 154.000 libras (200.000 dólares) para que el caso pueda mantenerse abierto, por lo que los investigadores podrán continuar sus pesquisas, por lo menos, hasta marzo.Un vidente británico habló de su muerte
No es la primera vez que aparece un vidente en la escena de la investigación por la desaparición de Madeleine. Por ejemplo, en 2012 Derek Acorah, el médium más famoso y controvertido de la televisión británica, comunicó a los Mc Cann que debían dejar de buscar a su hija, porque “ya no está en este mundo”. Informaba de ello el diario español La Razón.
Acorah aseguró a The Sun que recibió un mensaje desde el más allá, procedente de un “guía de espíritus” llamado Sam, en el que le confirmaba la muerte de Madeleine McCann, y que la pequeña muy pronto se reencarnaría en otra niña.
“Sé que los padres están convencidos de que Maddie está viva. Lo siento mucho pero hace ya algún tiempo que la niña está en el mundo de los espíritus”, aseguró Acorah a los McCann que, según una fuente cercana de la familia, sólo dijeron que estaban “hartos” de que personajes como éste se entrometieran en un asunto tan doloroso para ellos. “Sólo quiere darse publicidad”, afirmaron entonces.
Según este médium, su contacto en el más allá le confirmó que la niña murió al poco de desaparecer, y lo convenció de que no tenía ningún sentido que acudiera a Praia da Luz, al Algarve, para buscar pistas sobre la niña, como, por otra parte, habían hecho para entonces otros muchos videntes.
“Me senté en mi sala de meditación –relata Acorah– y pregunté a los espíritus. Sam me confirmó que la niña estaba muerta. Es horrible pero no tiene sentido que vaya allí. No quiero añadir más angustia a la familia, pero pronto tendrán noticias de lo que ocurrió con Maddie”.
Una vidente argentina acusó al padre
“Yo veo que esa noche un hombre está llevando en brazos a la nena, lo que menos me iba a imaginar es que era el padre”, dijo en 2008 Emilce Oliva, vidente que afirmaba haber colaborado con la agencia de detectives Método 3, contratada por los McCann para encontrar a Madeleine, de la que después se apartó debido a que “ponían las manos en el fuego por los padres” de la niña. Informó de ello entonces El Mercurio Online.
Emilce aseguraba que, gracias a su habilidad, podía ver a través de los ojos de la niña y en su entorno y afirmaba que la noche de su desaparición sólo percibía la presencia de los padres y de otro individuo, que sería un amigo de la pareja. Su visión, que concordaba con varias de las hipótesis iniciales de la investigación, es que la menor fue sedada por los McCann.
La vidente argentina, residente en España, relataba a Emol que “lo que pasó esa noche fue un accidente, la nena fue sedada de más”. Tras sus visiones, Emilce decía que fue a Portugal a verificar las imágenes que percibía y elaboró un mapa con el recorrido que habría hecho el padre con la niña en brazos.
Consultados vía telefónica por Emol, en la agencia Método 3 no confirmaron si Emilce Oliva efectivamente había colaborado con ellos en la investigación del caso Madeleine McCann, señalando escuetamente que se trataba de “información confidencial”.
Otra vidente argentina dio una versión distinta
El relato de Emilce no concordaba con el de otra psíquica, Isabel Cristina Ávila, y la propia vidente argentina lo recalcaba. Decía que se enteró a través de Emol de la hipótesis de la psíquica de Chimbarongo y que su visión era errada. “Yo le tengo mucho respeto porque se ve que es una mujer que hace mucho que trabaja. Yo coincido con ella en que la nena está en Praia da Luz, pero es imposible que Madeleine se haya ido solita caminando”, decía Emilce.
Señalaba que Isabel Cristina sostenía esta idea porque “no conoce cómo es el complejo (donde se hospedaban), entonces tendría que haber viajado a Portugal, no sé por qué no lo hizo”. Describía el resort como un lugar “muy cerrado y pequeño, con vigilancia, con mucha gente transitando, muy iluminado, es imposible que una criatura se haya ido solita sin que nadie la vea y menos a esa hora en verano”.
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