El sábado 17 de febrero de 2018, a las 21:00 horas, en la Catedral-Magistral de Alcalá de Henares, celebraremos un año más, Dios mediante, una Vigilia de oración y bendición, presidida por Mons. Juan Antonio Reig Pla. A esta Vigilia están invitados todos los que deseen la bendición de Dios para aprender a amar o crecer en el amor: los novios, los prometidos, los matrimonios católicos, pero también los solteros, viudos o consagrados.
También están invitados los matrimonios con dificultades, separados o divorciados, que quieran pedir a Dios la sanación de sus matrimonios y familias.
Asimismo, en la celebración se orará por toda vida humana desde la concepción y hasta la muerte natural; muy particularmente, el señor Obispo procederá a bendecir a todas las madres gestantes que asistan a la Vigilia.
En la Catedral-Magistral tendrán un lugar reservado las madres gestantes, así como los prometidos que vayan a casarse en 2018-2019, los esposos que cumplen su primer año de casados y los matrimonios que celebran sus bodas de plata (25 años) u oro (50 años); para ello deberán comunicar a sus párrocos, o al correo electrónico que se cita más abajo, su asistencia.
El correo donde se puede confirmar la asistencia es:
[email protected]
Al finalizar la Vigilia compartiremos un chocolate caliente en el claustro de la Catedral-Magistral.
Además, con ocasión de esta festividad, la página web del Obispado de Alcalá de Henares ofrece a sus lectores una sección titulada “Palabras de amor” donde se sugieren algunos textos para aprender a amar, para aprender a pensar sobre el amor, y, en fin, para aprender, con verdad, a hablar y a escribir, de amor y con amor, a la amada, al amado (www.obispadoalcala.org/palabrasdeamor.html).
¡Os esperamos a todos en la Vigilia!
«El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no es jactancioso, no se engríe; es decoroso; no busca su interés; no se irrita; no toma en cuenta el mal; no se alegra de la injusticia; se alegra con la verdad. Todo lo excusa. Todo lo cree. Todo lo espera. Todo lo soporta» (1 Co 13, 4-7)
Publicar un comentario