Continúa la difusión de las pseudoterapias sin que las administraciones públicas ni las autoridades sanitarias de muchos países hagan nada. Traemos aquí la última –hasta ahora– noticia de un medio español sobre un ejemplo más de estas propuestas peligrosas, agradeciendo la redacción de la noticia a Ángel Gómez Fuentes, corresponsal del diario ABC en Roma.
La última terapia alternativa en Italia la practica una doctora con el método de las «agresiones verbales», que incluye hasta insultos a los enfermos. Se trata de Gabriella Mereu (Cagliari, 1954), que fue suspendida por el colegio de médicos de Cagliari (Cerdeña). Después se trasladó a Turín, capital de la región de Piamonte, al norte de Italia.
Ella rebate así las descalificaciones a su terapia con esta explicación que da en su página web: «Yo he ideado la terapia verbal que desde hace años ayuda a muchas personas. Estoy convencida de que la medicina y el médico son solamente vehículos y que un doctor tendría que funcionar solo como un guía. La enfermedad es una expresión que revela en manera metafórica una vivencia emocional que ha llevado a la propia enfermedad».
Para ser curados por la doctora Gabriela Mereu no hacen falta análisis de sangre ni otras pruebas. Basta su palabra, a veces tacos e insultos. Cuenta que así ha curado incluso a parapléjicos, simplemente diciéndoles: «Usted no tiene nada». Todo es cuestión de palabras: «Aprendiendo a desvelar la verdadera naturaleza de vuestros síntomas, aprendiendo a descodificar las metáforas, podréis remontaros al origen de vuestros bloqueos mentales y finalmente llegar a la curación».Colas de enfermos en su consulta
Obviamente, también el colegio de médicos de Turín acaba de abrir una investigación, definiendo sus prácticas «secretas» y sin ninguna base científica o clínica. Se la acusa de «abuso de la credibilidad popular y de difusión de noticias falsas, exageradas y tendenciosas, que crean alarma entre los ciudadanos».
A pesar de estas serias advertencias oficiales, dos días después más de 150 personas hacían cola ante su estudio improvisado en un edificio popular de Turín. Aquí le han llegado pacientes con todo tipo de patologías, desde tumores a epilepsias, después del «tam tam» que se ha corrido en Facebook y otras redes sociales.
Epidemia de terapias alternativas
En realidad el caso Mereu es solo el último de una serie de médicos que practican curas alternativas, lo que lleva a muchos pacientes a abandonar tratamientos y medicamentos oficiales. Por esta causa, hubo varios muertos en los últimos meses, lo que suscitó preocupación en el país, obligando a intervenir a las autoridades sanitarias.
Hasta el presidente de la República, Sergio Mattarella, ha intervenido recientemente condenando esta medicina alternativa en términos muy duros: «Hay falsas terapias incluso contra el cáncer propuestas por curanderos o con técnicas de demostrada inutilidad», denunció el presidente.
Para luchar contra esta falsa medicina, que constituye una epidemia en Italia –algunos proponen hasta el bicarbonato– un grupo de especialistas, con el apoyo de la Federación nacional de los colegios médicos, pondrá en marcha en los próximos días una página web, con falsas terapias. Se llamará «Attenti a lle bufale» (atentos a los engaños).
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