(Agencias/InfoCatólica) El obispo de Solsona estableció unos criterios para usar las parroquias que anunció a través de una glosa parroquial publicada en la página web del obispado el pasado día 30 de abril, con motivo del tercer domingo de Pascua. Entre dichos criterios figura el de no ceder los templos católicos para actividades no religiosas.
Sin embargo, los sacerdotes del Fórum Ondara consideran que deben seguir acogiendo actividades laicas en los templos. Eduard Ribera, párroco de Granyena de Segarra y miembro de este grupo de clérigos de la diócesis, ha declarado al diario Regió-7 que lamenta que Mons. Novell haya iniciado «una cruzada para separar lo sagrado de lo profano».
Ribera defiende que los sacerdotes que forman parte de este foro de opinión tienen «una mirada amplia» y el propósito de continuar abriendo las parroquias a actividades.
«Somos sacerdotes ya mayores que creemos firmemente en la imagen de una iglesia que se abre al pueblo, que se mantiene como la fuente de la plaza de donde todo el mundo puede beber, y no una capillita extraña y cerrada», ha añadido.
El capellán opina que el documento que les ha hecho llegar el obispo es «innecesario», al considerar que los rectores ya hacen un buen trabajo al velar por que las actividades que se llevan a cabo en las parroquias «no sean contrarias a la fe, a pesar de que no tengan motivos estrictamente religiosos».
Los sacerdotes del Fórum Ondara han indicado además que muchos templos se han salvado «porque la administración ha puesto dinero a cambio de poder hacer actividades».
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