(CNA/InfoCatólica) En una entrevista con Catherine Hadro, Pompeo dijo que el presidente Donald Trump le había dejado claro que proteger a los no nacidos «es una parte importante para lo que esta administración está trabajando....Los dólares de los contribuyentes estadounidenses no se utilizarán para financiar los abortos»
Parte de esa tarea, dijo Pompeo, es trabajar para asegurar que los fondos de los contribuyentes no se utilicen para apoyar a organizaciones no gubernamentales que realizan «servicios relacionados con el aborto o relacionados con el aborto».
«Queremos hacer todo lo posible para asegurarnos de que eso no suceda», dijo, y agregó que la política de refuerzo emprendida recientemente, cerrará las «lagunas» que permitieron a las organizaciones no gubernamentales eludir dicha política.
Pompeo recordó que el mes pasado, además de impulsar la Política Ciudad de México para la OEA, su gobierno decidió aplicar totalmente la Enmienda Siljander, una ley federal que prohíbe el uso de fondos de los contribuyentes, incluida la asistencia en el extranjero, para hacer lobby a favor o en contra del aborto en el extranjero.
Pompeo dijo que la implacable aplicación de esta ley existente sería «un paso sustancial».
«Queremos asegurarnos de todo lo que hacemos, la forma en que firmamos contratos, la forma en que nos comunicamos, sirva para que todas las organizaciones a las que los contribuyentes de los Estados Unidos proporcionan fondos comprendan su obligación, su deber de garantizar que no se promueva el aborto en ningún lugar del mundo».
Pompeo refutó las afirmaciones de la Dra. Leana Wen, presidenta de Planned Parenthood, quien aseguró que la política de Trumpe censurará «a los médicos en el extranjero».
«Conocemos la Primera Enmienda aquí en los Estados Unidos. No estamos haciendo nada para negar a nadie la capacidad de hablar sobre un tema que consideren importante e incluso si no están de acuerdo con los puntos de vista de esta administración. Lo que simplemente estamos diciendo es que el dinero estadounidense, la política estadounidense, va a cambiar. Vamos a dar lo mejor de nosotros mismos para asegurarnos de que los más débiles entre nosotros, los no nacidos, no sean, con los dólares de los contribuyentes estadounidenses, abortados».
Cuando se le preguntó qué había dicho Trump sobre la protección de la vida en el extranjero, Pompeo respondió: «lo dejó en claro: esa es la misión».
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