(CNA/InfoCatólica) Un total de 169 miembros de la Cámara de Representantes y 49 senadores firmaron las respectivas cartas.
«Le pedimos al presidente Donald Trump que continúe con su trabajo en defensa de la vida. Mis colegas y yo también estamos comprometidos a proteger tanto a los niños no nacidos como a sus madres de la violencia del aborto», dijo el congresista Chris Smith (R-NJ).
Smith agregó que estaba «profundamente contento» de que hubiera 169 miembros de la Cámara de Representantes que firmaran la carta a favor del veto presidencial «sobre la base de que cualquier disposición pro-vida se está debilitando o eliminando».
«No permitiremos que la dura lucha por los no nacidos quede sin efecto», dijo el senador Steve Daines (R-MT). «Estoy firmemente a favor de la defensa de las medidas pro-vida del Presidente y continuaré trabajando con mis colegas para avanzar en nuestra agenda pro-vida».
Si bien ambas cartas elogiaron las diversas políticas pro-vida de Trump durante su tiempo en el cargo, la carta de la Cámara de Representantes enfatizó la importancia de la Enmienda Hyde y la política de Protección de Vida en la Asistencia de Salud Global, las cuales restringen la financiación de los contribuyentes a favor de realizar abortos en el país y en el extranjero.
Recientemente, los demócratas de la Cámara de Representantes aprobaron una ley de gastos cuya redacción anularía la política de Protección de la Vida en la Asistencia de Salud Global. También se han comprometido a trabajar para anular la Enmienda Hyde, que impide que los contribuyentes financien el aborto en la mayoría de los casos.
La carta del Senado se centró en los derechos de conciencia para los profesionales de la salud y solicitó que los fondos de los contribuyentes en virtud del Título X (planificación familiar) no vayan a «instituciones que realizan o fomentan aborto».
En mayo, la administración de Trump implantó nuevas políticas que prohibían que los fondos del Título X acudieran a organizaciones como Planned Parenthood. Dicha medida fue presentada como una «gran victoria» por los defensores pro-vida.
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