(InfoCatólica) El comunicado Por el bien de nuestro país, firmado por el presidente, el vicepresidente y el secretario general de la CEC, consta de 8 puntos. Los prelados colombianos piden más o menos lo mismo que han pedido los obispos de otros países del continente americano que están asistiendo a protestas, tanto pacíficas como violentas, pidiendo mejoras sociales.
Desde la CEC se asegura que las manifestaciones dan fe del «profundo anhelo» del pueblo para poner fin a los problemas que afectan a la nación colombiana, rechazan los actos de violencia, muestran su preocupación porque en algunas movilizaciones no queda claro cuál es su origen y objetivo, reclaman un diálogo nacional para lograr la reconciliación -a la vez que ofrecen a la Iglesia como mediadora-, aseguran que la solución no puede venir de una persona o grupo sino de todos, reclaman la formación ética de las personas y, por último, piden a los fieles que recen «para superar este momento difícil», exhortando a las parroquias a organizar, precisamente jornadas de oración.
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