Obispos de países de la antigua Unión Soviética peregrinan en Fátima

(Gaudium Press/InfoCatólica) Peregrinos oriundos de varios países de la ex-Unión Soviética llegaron a Fátima para, dentro de las solemnidades del Centenario de las apariciones, conmemorar el día 13 de julio de 1917, cuando Nuestra Señora se refirió explicita y directamente sobre Rusia.

Para la peregrinación a propósito de las apariciones de julio de 1917 el tema es: «La Virgen María, Reina de la Paz».

Además de la peregrinación de los obispos católicos de los países de lengua rusa, el Santuario acoge cerca de 110 grupos de peregrinos, oriundos de 24 países.

13 de julio de 1917

Fue en la aparición del 13 de julio de 1917 que Nuestra Señora dijo a los pastorcitos: «Para impedir la guerra vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la Comunión reparadora en los primeros sábados».

Y fue además en ese día de 1917 que, conforme dice la Hermana Lucía en sus «Memorias»: «Si atienden a mis pedidos, Rusia se convertirá y tendrán paz; si no, esparcirá sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia. Los buenos serán martirizados, el Santo Padre tendrá mucho que sufrir, varias naciones serán aniquiladas. Por fin, mi Inmaculado Corazón triunfará».

Sueño y realidad

Mons. Clemens Pickel, obispo de la Diócesis de San Clemente en Saratov, Rusia, que se encuentra en Fátima dijo a periodistas que «es un día muy bonito para nosotros, vinimos a decir gracias, 100 años después del pedido de la Virgen María».

El Obispo de la Diócesis rusa de San Clemente historió que durante el régimen soviético, las personas sabían que Fátima existía: era un lugar donde no podían venir.

En verdad, «Era un sueño y ahora podemos realizarlo», dijo Mons. Clemens.

Durante el comunismo, «Había muchas personas en Rusia que rezaban», continuó historiando Mons. Clemns Pickel, «ellos sabían de Fátima, pero era peligroso hablar de eso, si hablasen de Fátima, de los Pastorcitos, por ejemplo, podrían ser condenados a 10 años en Siberia, en los campos de trabajo».

Conversión de Rusia

Mons. Pickel presidió la Misa en el Santuario. Para él, estar en Fátima el día 13 de julio para la peregrinación internacional tiene un significado especial para las comunidades de lengua rusa:

«Vinimos aquí 100 años después del encuentro de la Virgen María con los Pastorcitos, especialmente en julio, primero por una razón práctica: cuando nos invitaron a venir, nos dieron dos fechas, julio u otro mes, y dijimos: claro que julio es más importante para nosotros, es el día en que Nuestra Señora habló de la conversión de Rusia, de la oración, la penitencia, el sacrificio», dijo.

Los Obispos Rusos en Fátima

A los periodistas, la Sala de Prensa del Santuario de Fátima informó que además del obispo de San Clemente en Saratov, están en la Cova de la Iria Mons. Paolo Pexxi, arzobispo de Moscú; Mons. Iosif Vert, obispo de la Diócesis de la Transfiguración en Novosibirsk, Rusia; Mons. Kirill Klimovich, obispo de la Diócesis de San José en Irkusk, Rusia; Mons. Tomash Peta, arzobispo de la Diócesis de Santa Virgen en Astana, Kazajistán; Mons. Athanasius Schneider, obispo coadjutor de la misma diócesis; y el padre Andrzej Madej, de Turkmenistán. (JSG)

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