(AsiaNews/InfoCatólica) Más de 260 cristianos en Hong Kong, protestantes y católicos, se unieron ayer por la noche en oración por el disidente chino Liu Xiaobo y su esposa Liu Xia, en la capilla de una escuela católica local.
En los últimos días, Liu Xiaobo, Premio Nobel de la Paz en 2010, enfermo de cáncer de hígado en fase terminal, fue liberado de la prisión para recibir cura médica en un hospital de Shenyang (Liaoning). Su esposa está bajo vigilancia constante desde que su marido fue encarcelado.
El cardenal Joseph Zen, obispo emérito de Hong Kong, dijo a la asamblea que los cristianos están cerca de la pareja y que aprendió de Liu Xiaobo, a decir la verdad, citando un verso del libro de Jeremías (11,19-23).
El cardenal Zen dijo que Liu Xiaobo es como un profeta del Antiguo Testamento que habla en nombre de Dios y dice la verdad. Liu dice la verdad, basada en hechos y análisis, y da una respuesta clara en la Carta ’08, compilada por Liu e inspirada en la Carta '77.
La Carta ‘08 es un manifiesto inicialmente firmado por más de 350 intelectuales y activistas chinos de los derechos humanos, publicado en 2008 con motivo del 60 aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
«Hemos aprendido de Liu - continuó el cardenal - una persona que dice la verdad. Insistimos en mostrar preocupación por lo que está sucediendo en China. Estamos tranquilos y en paz. No tenemos odio, como Liu no tenemos odio».
Durante el encuentro se leyeron extractos de los escritos de Liu Xiaobo, como su artículo «No tengo enemigos: mi declaración final», escrito en 2009. Uno de los pasajes dice:
«Espero [el día] en el cual mi país sea un país con libertad de expresión, donde la palabra de todos los ciudadanos sea tratada con respeto; donde los diferentes valores, ideas, creencias, opiniones políticas ... competirán entre sí y coexistirán pacíficamente... espero que sea la última víctima de esta inquisición que domina sin fin a China y que de ahora en adelante nadie pueda ser acusado por sus palabras».
El rev. Wu Chi-wai, del Movimiento de renovación de la Iglesia de Hong Kong, señaló a los participantes que aunque no se conocen los antecedentes de la fe de Liu Xiaobo, sus escritos están llenos de valores cristianos. El rev. Wu citó la reflexión de Liu sobre el discurso de San Juan Pablo II sobre el amor y la reconciliación durante la visita del Papa a Jerusalén y Oriente Medio (en 2000 y 2001), y la oración de Liu por las dificultades experimentadas por Ding Zilin, de las madres de Tiananmen.
Citando un salmo de Lamentaciones (7, 6-17), el rev. Wu recordó a la pareja Liu y su dolor y agonía.
La vigilia de oración
La vigilia fue organizada por seis grupos cristianos, incluyendo la Comisión Católica de Justicia y Paz, la Comisión sobre el asunto de trabajo, la Sociedad Cristiana de Hong Kong y el Instituto Cristiano de Hong Kong.
Al principio del encuentro se ha presentado un video-documental sobre Liu Xiaobo, que demuestra su participación en el movimiento pro-democrático de 1989, una entrevista antes de su detención, la silla vacía en la ceremonia del Premio Nobel de la Paz en 2010; algunas fotos de Liu Xia, quien ha vivido bajo vigilancia y amenazas.
Los cristianos oraron por la pareja, honrando a Liu Xiaobo como «la conciencia de China», que apoya la democracia, la libertad, los derechos humanos, el estado de derecho, pero perdió la libertad porque fue encarcelado por un régimen dictatorial. Su esposa, Liu Xia, ha estado bajo arresto domiciliario de forma continua, humillándola en su dignidad humana.
Los cristianos han pedido la protección de Dios para la pareja, para que perseveren dentro de la persecución, y han orado por todos los disidentes y defensores de los derechos humanos en China que sufren persecución y violencia similar.
El grupo expresó también oraciones por la democracia en China y Hong Kong.
Estos y todos los ciudadanos de la zona fueron invitados a firmar las tarjetas postales que llevan la cara sonriente de Liu Xiaobo y una inscripción: «Xiaobo, estamos contigo». Las postales se enviarán a Liu Xiaobo como una señal de apoyo para él y su esposa.
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