La Asociación Española de Bioética y Ética Médica rechaza la aprobación de la eutanasia

(ACIPrensa/InfoCatólica) La Asociación Española de Bioética y Ética Médica (AEBI) emitió un comunicado respecto a la Ley de la Eutanasia aprobada por el Congreso de Diputados de España, donde expresa su «total desacuerdo con esta Ley».

El comunicado dice: «Es injusta y contraria al bien común de la sociedad española.

Es una imposición ideológica regresiva, que vulnera los derechos de los ciudadanos, el “ethos” de las profesiones sanitarias y desprotege a los más débiles.

La mala redacción de la Ley, presenta una pobre calidad tecno- jurídica que va a permitir con gran facilidad un uso fraudulento de ella. Esto último se agrava por una implantación rápida e incontrolada».

Reclaman que dicha ley sea derogada pronto. Esperan que los profesionales sanitarios no se presten para la aplicación de la misma, que se presente un recurso de inconstitucionalidad y exigen «la implementación de cuidados paliativos para todos los ciudadanos en el final de la vida en consonancia con el acceso universal a la asistencia sanitaria».

«Los cuidados paliativos deben ser una prestación del sistema público de salud sin importar la capacidad económica o la situación personal o geográfica de cada español. Su implantación, tiene que ser efectiva, sin dilación, en toda España».

«Estos cuidados deben ser aplicados por profesionales preparados específicamente y evaluados en sus competencias.

La protección legal de la vida humana tiene que ser incondicional y abarcar el entero ciclo vital. Generar excepciones supone condicionar su respeto a la valoración de otras personas.

Además, nunca puede ser un deber de un profesional sanitario provocar la muerte o ayudar al suicidio de una persona tal como indica la ley, porque no son actos relacionados con la salud de los pacientes. Son, por el contrario, acciones opuestas a la deontología de esos profesionales y, en consecuencia, no se les puede exigir realizarlas».

La AEBI explica que el registro de médicos debe hacerse en base a: «los profesionales que estén conformes con las prácticas eutanásicas», y no con los médicos con objeción de conciencia.

Esta ley tiene numerosos vacíos legales y deja desprotegidos a todos los pacientes, a los que están a favor y a los que no. Prueba de ello es que, si el paciente no puede firmar el consentimiento del procedimiento, podrá hacerlo una tercera persona, incluido el médico tratante.

Debido a la pandemia, los cuidados paliativos ya se ven bastante afectados y escasos, los mismos pacientes con COVID-19 no son atendidos si no tienen expectativas de sobrevivir, y ahora, un médico puede ofrecer la eutanasia como alivio a su sufrimiento.

Específicamente se incluyen en la ley los términos «enfermedad grave e incurable o un padecimiento grave, crónico e imposibilitante» para solicitar la eutanasia, pero ¿es un paciente capaz de discernir la gravedad de su enfermedad de acuerdo a su nivel de dolor?, ¿o de su frustración o desespero momentáneo?, ¿o es un médico alguien calificado para decidir a qué paciente ofrecer la muerte?, y, ¿por qué ese mismo médico no le ofrecería los mejores cuidados paliativos?

Si desea puede leer el comunicado completo aquí.

Let's block ads! (Why?)

Etiquetas:

Publicar un comentario

[blogger][facebook]

Agencia Catolica

Forma de Contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.
Javascript DesactivadoPor favor, active Javascript para ver todos los Widgets