(El Diario) Mons. Elizalde ha presidido en la Catedral María Inmaculada de la capital de Vitoria la celebración de la eucaristía del día del Corpus Christi, que ha concelebrado con el vicario general, miembros del Cabildo de la Catedral y sacerdotes diocesanos y a la que han asistido numerosos vitorianos.
El obispo ha afirmado en su homilía que la celebración del Corpus «tiene algo especial», debido a la celebración del Jubileo Mariano, y ha recordado que este domingo es también el Día de Cáritas.
Mons. Elizalde ha concluido sus palabras con un llamamiento al «compromiso de la comunidad cristiana». «No podemos tener viviendas cerradas en Vitoria cuando los inmigrantes viven en condiciones infrahumanas, con fianzas y alquileres elevadísimos y disuasorios. Nosotros como comunidad y como Iglesia no podemos mirar a otro lado, debemos ayudar a cumplir las condiciones justas», ha manifestado.
Una vez concluida la eucaristía, se ha celebrado la Procesión del Corpus, que ha partido de la Catedral María Inmaculada a la calle Prado y, posteriormente, a la Plaza Nueva, donde de ha desarrollado la bendición.
La procesión recuperó el año pasado la Custodia Procesional, del siglo XVII, tras su limpieza, pulimento y restauración. La custodia, de plata, de estética barroca, se compone de tres cuerpos ascendentes sobre basamento.
Esta pieza de orfebrería fue realizada por el platero Juan Lorenzo de Valladolid y donada en 1623, a la entonces Colegiata de Santa María, por el arzobispo don Francisco de Esquível.
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