(AsiaNews/Agencias) En el período que va de 2002 a 2015, son más de 33.000 personas las que han muerto por obra del Estado islámico (EI) y de las organizaciones afiliadas al movimiento yihadista. Es lo que surge de una investigación publicada en los últimos días por el Consorcio nacional de estudios sobre terrorismo y de respuestas al terrorismo, de la Universidad de Maryland (Start). La investigación, que ha sido fruto del trabajo de un grupo de expertos del ateneo estadounidense, muestra además que los milicianos han atacado cuando menos 4.900 veces en todo el mundo.
Los milicianos de Daesh [acrónimo árabe de Estado Islámico] han llevado a cabo el 13% de los actos terroristas ocurridos en el mundo durante el período de tiempo investigado; en lo que respecta al número de muertos, el 26% de total ha perdido su vida por manos de los yihadistas del llamado Califato islámico.
Para los investigadores, el mes de octubre de 2002, con el asesinato del diplomático americano Laurence Foley en Jordania, por obra de un pequeño grupo dirigido por Abou Moussab al-Zarkawi, marca el primer ataque del pequeño grupo, que luego irá creciendo con el tiempo. El mismo evolucionará hasta llegar al año 2013, con la estructura actual y la denominación de «Estado islámico», hoy conocida en todo el mundo.
La base para la investigación está conformada por los datos presentes en el archivo Global Terrorism Database, en el cual son mencionados ataques llevados a cabo por individuos y grupos anteriores al EI (ex ISIS), por los fieles al mismo ISIS y aquellos que han sido inspirados por los yihadistas o que han sido perpetrados por los hombres del Califato mismo. En esta lista hay 30 organizaciones, entre las cuales figuran Boko Haram en África occidental, Tehrik-e-Khilafat en Pakistán y el Bagsamoro Islamic Freedom Movement en las Filipinas.
Además de provocar 33.000 muertos, en los atentados han resultado heridas más de 41.000 personas; más de 11.000 han sido objeto de secuestros.
Desde mayo de 2013 y hasta el fin de dicho año, el EI ha perpetrado un promedio de 46 ataques al mes. El dato crece en el 2014 hasta alcanzar 104 atentados al mes, y 102 al año siguiente. El hecho de sangre más grave, según el estudio, ocurrió en Irak en junio de 2014, con el secuestro de cerca de 1600 reclutas del ejército regular, que luego fueron ajusticiados casi en su totalidad.
En el 80% de los casos, los atentados totalizan cerca de 150.000 los de matriz terrorista, si se considera desde 1970 hasta hoy, perpetrados por el Estado islámico han ocurrido mediante el uso de explosivos; en el 16% de ellos, se ha registrado el uso de armas de fuego.
Los datos que surgieron de la investigación muestran asimismo algunas correlaciones en los métodos utilizados por los grupos terroristas. Por ejemplo, los precursores del Estados islámico, entre el 2002 y el 2013, atacaron casi exclusivamente en Irak. A partir de 2014 los atentados adquieren una escala mundial.
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