(AsiaNews/InfoCatólica) «La Iglesia en la India lamenta la pérdida de vidas inocentes, de nuestros hijos [muertos] en la tragedia del hospital en Gorakhpur». Con estas palabras el cardenal Baselios Cleemis, presidente de la Conferencia Episcopal de la India (CBCI), expresa sus condolencias de toda la comunidad católica de la India a las familias afectadas por «esta inmensa pérdida, que afecta a toda la nación».
De esta manera habló sobre la muerte de decenas de niños y bebés en uno de los hospitales más grandes de Uttar Pradesh, afectados por falta la de oxígeno. De acuerdo con la prensa local, el número de muertos podría elevarse a 79. El presidente de los Obispos ha reiterado que «la pérdida de vidas preciosas es un problema para todo el país. El gobierno tendría que proporcionar una atención adecuada, y ahora tiene que tomar las medidas necesarias».
La tragedia ocurrió en los últimos días en las salas de pediatría neonatal y neurología. Según los investigadores, la empresa que suministra los cilindros de oxígeno se habría detenido la distribución en el hospital a causa de las deudas pendientes de pago. Los ejecutivos de la compañía se estarían justificado afirmando que habían informado con suficiente antelación a la administración del hospital, pero no resolvieron la cancelación de la deuda.
Desde el punto de vista político, la muerte de los niños es una pesada baldosa para el nuevo gobierno de Yogi Adityanath, primer ministro del Estado, elegido hace solo unos meses. El político ha visitado a los familiares de las víctimas, acompañado por el Ministro de Salud, y aseguró a la apertura de la investigación.
La muerte de los niños vuelve los reflectores sobre las graves deficiencias del sistema de salud pública de la India. Los expertos locales afirman que la sucesión de los gobiernos no ha hecho más que agravar las dificultades del personal y los suministros. «En este momento de gran dolor - concluye el cardenal Cleemis - la Iglesia ofrece su apoyo a las familias de las víctimas. Oramos para que el Señor les dé su consuelo».
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