(UCANews/InfoCatólica) El Tribunal Superior de Bombay ordenó que el padre jesuita Stan Swamy, de 84 años, sea trasladado al Hospital de la Sagrada Familia, administrado por la iglesia, para recibir tratamiento después de que su salud se deteriorara en prisión.
El anciano sacerdote, que padece la enfermedad de Parkinson y otras enfermedades relacionadas con la edad, está detenido en una prisión en Mumbai, capital del estado de Maharashtra, desde el 9 de octubre.
La orden judicial del 28 de mayo se produjo después de que el abogado del padre Swamy le dijera al tribunal que la salud del sacerdote se había deteriorado aún más y necesitaba un tratamiento especial fuera del hospital de la cárcel.
El abogado Mihir Desai presentó un alegato especial citando su estado de salud el 27 de mayo ante el tribunal.
El tribunal también ordenó al hospital católico de Mumbai que asignara un asistente para cuidar al sacerdote.
«Estamos contentos de que el tribunal haya ordenado que el padre Swamy sea trasladado al hospital», dijo a UCA News el 28 de mayo el padre A. Santhanam, un abogado jesuita que está monitoreando su caso.
«El padre Swamy se ha vuelto tan débil en estos días que no puede caminar ni comer adecuadamente y su presión arterial estaba bajando. Será trasladado al hospital hoy o mañana».
La semana pasada, el padre Swamy le dijo a la corte a través de una plataforma en línea que su salud había empeorado desde que fue encarcelado. El tribunal estaba escuchando su solicitud de fianza presentada por motivos de salud, pero pospuso la audiencia hasta junio.
El sacerdote fue arrestado el 8 de octubre en su casa en Ranchi, capital del estado de Jharkhand, en el este de India, acusado de conspirar con rebeldes maoístas proscritos para derrocar al gobierno federal en Nueva Delhi.
El tribunal le había dado la opción de ir a un hospital del gobierno para recibir tratamiento, lo que rechazó. Dijo que su única oración era por una fianza provisional y que prefería permanecer en la cárcel hasta que le fuera concedida.
El padre Swamy quería volver a su residencia en Ranchi, pero el tribunal no lo permitió y, en cambio, acordó enviarlo a un hospital privado para recibir tratamiento. También rechazó esa oferta.
El sacerdote se acercó al tribunal superior el 26 de abril en busca de libertad bajo fianza después de que la Agencia Nacional de Investigación (NIA) rechazara sus solicitudes dos veces.
Es una de las 16 personas acusadas en virtud de la estricta Ley de Prevención de Actividades Ilícitas de la India, una controvertida ley que los activistas de derechos y otros quieren que se elimine.
Los jesuitas y activistas de derechos humanos dicen que fueron arrestados por cargos similares para silenciar sus críticas al gobierno federal dirigido por el partido pro hindú Bharatiya Janata (BJP).
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